miércoles, 26 de febrero de 2014

LOS DIFERENTES USOS DEL RELATO


Los relatos ejercen su atractivo porque conectan con los lectores de formas muy diferentes y profundas, debido a que una historia bien contada permite establecer una conexión a distintos niveles. En opinión de Owen (2003), los relatos se prestan a una amplia variedad de usos:

1)    Por puro placer.
2)    Para modificar el ánimo, el estado general o el nivel de activación de una persona o de un grupo.
3)    Para reformular un problema presentándolo como una nueva oportunidad.
4)    Para complementar una conducta o actitud desde una perspectiva diferente.
5)    Para cuestionar una  visión limitada del mundo.
6)    Para cuestionar una conducta inaceptable.
7)    Para ofrecer un modelo de conducta o de actitud más útil.
8)    Para explicar un aspecto de forma indirecta.
9)    Para demostrar que un determinado problema no es novedoso ni excepcional.
10) Para fortalecer la creatividad.
11) Para abrir un interrogante, estimular el cerebro e introducir información en las mentes abiertas a la espera de que se resuelva el interrogante.
12) Para estimular el debate y  la discusión.
13) Para rebatir o confirmar las visiones del mundo que tienen los oyentes.
14) Para incluir a la audiencia en algunos elementos repetitivos de la historia, a fin de practicar nuevas estructuras lingüísticas o de vocabulario.
15) Para estimular el relato de otras anécdotas o historias entre los lectores.
16) Para introducir aspectos relacionados con la estructura de la comunicación eficaz.
17) Para demostrar la naturaleza sistémica de las relaciones humanas.
18) Para suscitar la curiosidad.
19) Para demostrar que los puntos de vista y la sabiduría de otras culturas  presentan muchas similitudes, al igual que diferencias, con los nuestros.
20) Para introducir información por debajo del nivel consciente del conocimiento.
21) Para demostrar que cada persona interpreta la información de forma diferente, de acuerdo con su propia experiencia única y el mapa del mundo que le es propio.
22) Para demostrar que la “percepción es proyección”: nuestro mapa del mundo determina el modo en que experimentamos el mundo.
23) Para tener una excusa para escribir un libro.
24) Para tener una excusa para leer un libro.
25) Para establecer interrelaciones entre el pasado, el presente y el futuro.
26) Para que la información que queremos transmitir quede mejor estructurada y sea más fácil de recordar.
27) Para acrecentar la apreciación del papel y la fuerza de la metáfora en los relatos y en la transmisión de significado en el lenguaje cotidiano.
28) Para modificar un paradigma.
        Cualquiera sea el motivo por el que decida leer una obra, la sola decisión de dedicar un espacio de tiempo a la lectura ya es suficiente. Después de leer una buena obra se dará cuenta que ya no es el mismo.